El Empleo en tiempos de COVID-19
Previo a la declaración del Estado de Alarma, los servicios de formación y empleo de la Fundación Carlos Martín (Aula de Promoción y Mejora de Competencias (PROMECO) y el Centro Ocupacional de Formación, Oportunidades e Inserción Laboral (COFOIL), Centro de Especialidades Formativas, Agencia de Colocación, etc), se encontraban trabajando 24 personas con discapacidad intelectual en distintas empresas de mercado abierto (17 hombres y 7 mujeres).
Con una mirada positiva, podemos decir que han retomado su actividad laboral el 85% de esos trabajadores, que de alguna manera estuvieron afectados por ERTES, finalizaciones de contratos y despidos, permisos retribuidos y sin retribuir, e incluso bajas médicas.
También, la crisis provocada por COVID-19, ha supuesto una oportunidad laboral para varias personas: 4 personas más se incorporaron al mercado de trabajo en empresas ordinarias.
El CEE de la Fundación continuó su actividad como esencial durante el Estado de Alarma. Así nos lo contaba uno de sus trabajadores:
“He venido a trabajar todos los días durante el estado de alarma, apenas me cruzaba con gente por la calle y eso asustaba un poco. Pero ha sido un orgullo venir a trabajar y saber de alguna manera, que nuestro trabajo era importante”
(Operario del CEE).
Destacar que también han sido varios casos, en los que la actividad laboral de la persona con discapacidad intelectual, ha sido el único sustento económico del hogar durante los meses de estado de alarma, por pérdida temporal o pérdida total del empleo del resto de miembros de su unidad de convivencia.
En la actualidad el CEE, Funcarma S.L.U. cuenta con una plantilla de 60 operarios, con un pronóstico a corto plazo favorable, tras lo acontecido en los últimos meses y repasando el impacto tan negativo en cuanto a empleo y oportunidad laboral ha supuesto esta crisis sanitaria.
… Por Laura Recuero